Vivir para servir

Gran parte de las experiencias parapsicológicas que he experimentado son ocupadas por los Sueños Lúcidos, desde el día 1 que me tope con la información de que tal experiencia podría ser vivenciada por todos y cada uno de los seres que en este plano estamos, y que gocemos de la salud mental correspondiente, quede fascinado con lo que suponían estas prácticas, desde entonces he practicado (intermitentemente debo decir) esto de tener sueños lucidos.  Lo que sigue es un relato testimonial de lo que vendría siendo mi primera vez consciente dentro de un sueño, anterior a esta vez, me había sentido consciente en uno que otro sueño, por segundos, algo bastante efímero. Creo que todos en algún momento nos hemos sentido conscientes y/o despiertos durante un sueño, en el que nos damos cuenta de que lo que está ocurriendo no corresponde con las horas de vigilia y eso genera un disparo de consciencia momentánea, en el que por instantes te haces con el control del sueño, eligiendo así tus próximos p

En mi entrada anterior hablé sobre la Coherencia y les dije que estaría compartiendo "ejercicios" prácticos para reconocernos cuando nos estemos comportando incoherentemente en alguna situación en específico. También, les compartí 3 ejemplos en donde podíamos reconocer el fallo en la coherencia para así identificar en cuál de los elementos estábamos fallando según la situación. Elementos que vienen siendo el Pensamiento, el Sentimiento y la Acción.  Pero antes de empezar con lo práctico, me gustaría colocar un poco más de entendimiento sobre la interacción de estos elementos para que así tengamos una imagen más clara en lo que respecta a su participación en este proceso y porque juegan un papel tan importante al momento de reconocernos en Coherencia.  En lo personal, me gusta definir la coherencia como un proceso lineal y sistemático en el que el génesis de una situación o experiencia significa la interacción entre el Pensamiento y el Sentimiento para luego concluir en una A

En la vida, experimentamos muchísimas situaciones en las que no hallamos el por qué de lo que acontece, más para mal que para bien, ya que cuando las cosas salen "bien" no solemos cuestionarnos qué fue lo que hicimos para que el desenlace fuese tal, por el contrario, cuando el desenlace no es tan enriquecedor o lo esperado, solemos cuestionarnos en dónde fallamos, o peor aún, la causa, para poder hacerle con la culpa de todo. En su mayoría, lo que nos lleva a experimentar estas situaciones tiene una virtud involucrada de donde parte el estudio que podemos realizar para así encontrar dónde ocurrió la falla, quién o qué es finalmente el responsable de lo que hemos experimentado. Esta virtud (cómo yo le llamo) viene siendo la Coherencia , y para mí la coherencia es sincronicidad. Pero, sincronicidad de qué?, entre qué? O con qué?. Es la interacción y alineación de 3 elementos fundamentales para la puesta en escena de cualquier cosa que nos dispongamos a hacer, pienso yo, que est

Creo que todos hemos tenido un sueño más grande que nuestra voluntad para alcanzarlo, bien sea porque parece muy poco probable o accesible, o porque parece ridículamente imposible según las características de este sueño, de esa meta, de ese plan. Esto, en la mayoría de los casos concluye en el abandono, en la rendición, en la inconclusión de algo que prometía realización. En esta entrada no voy a hablarte de "rituales" muy estructurados de cómo atraer a tu vida eso con lo que sueñas con tanto afán, no te diré que serás capaz de conseguir cualquier cosa en la vida porque poco va a depender de mí el que tú lo logres, tampoco es mi intención crearte una imagen de que yo vivo con esto el día a día. Pero si te voy a contar cómo resultó para mí la vez que más conscientemente he trabajado usando la ley de atracción a mi favor y como herramienta para el logro de mis objetivos. Era Marzo del 2018, mi empleo era de recepcionista/concierge en un hotel de "tres estrellas" (no